Afundación y la Universidade de Santiago pondrán en marcha un nuevo proyecto para desarrollar hábitos saludables y estilos de vida que mejoren la salud cognitiva en las personas mayores, desde una perspectiva de conocer para prevenir y basado en evidencias empíricas. 

'Conociendo mi mente' surge a partir de la detección por parte del equipo de trabajo del programa de Envejecimiento Activo de Afundación de una preocupación entre las personas socias de los espazos +60 sobre el deterioro de la salud cognitiva, las demencias, señales de alarma y estrategias de prevención, a la que no dan respuesta suficiente los programas de entrenamiento cognitivo clásicos, comúnmente conocidos como talleres de memoria. 

Así, de la mano de docentes e investigadores de la Unidad de Psicogerontología de la Facultad de Psicología de la Universidade de Santiago, se configura un programa en cuyo diseño y contenidos participaron las propias personas beneficiarias y que se está implementando actualmente como proyecto piloto en los espazos +60 Afundación de Santiago y Pontedeume. Tras esta fase que acaba de finalizar, en Santiago y Pontedeume, el programa se revisará para adecuarlo a las mejoras propuestas por las personas participantes. Una vez implementados estos cambios, 'Conociendo mi mente' se programará en los 11 espazos +60 de Afundación a partir del mes de octubre, tras una formación previa a los profesionales que impartirán los talleres.

Con un lenguaje adaptado y un enfoque participativo que combina teoría y práctica, el programa tiene como objetivo acercar a las personas participantes el conocimiento científico sobre la salud cognitiva, su modificabilidad, los hábitos y estilos de vida que ayudan a preservarla, etcétera. Así, entre otros contenidos, se abordarán los cambios psicobiológicos de nuestro cerebro a medida que envejecemos y los mecanismos compensatorios que desarrollamos, aprender a distinguir qué es esperable y, por el contrario, qué podemos considerar un signo de alarma, qué son las demencias y por qué se producen, factores de riesgo y protectores, el estrés y sus efectos en la salud cognitiva, la memoria y la atención y estrategias para mejorarlas, etc.

En definitiva, se trata de que las personas participantes puedan conocer para prevenir, desarrollando hábitos saludables y estilos de vida que mejoran la salud cognitiva, partiendo siempre de la evidencia empírica que aportan las investigaciones desarrolladas en lo últimos años.